El secretario
Whitney Oc está tratando de trabajar cuando su secretaria Jade Maris viene tropezando tarde en su oficina. Jade apenas lo ha hecho en la puerta antes de dejar los papeles que tiene en todas partes. Incluso cuando Jade se ha arrodillado para recoger todo, Whitney comienza a prestarla sobre su comportamiento y su traje. Ayudando a Jade fuera de su chaqueta, Whitney tiene a su subordinado hacer una vuelta. Satisfecho de que ella ha ayudado a Jade a ser un poco más profesional en su vestido, Whitney le dice que en el asunto del castigo por su mala conducta, Jade tendrá que doblarse sobre el escritorio. Incluso cuando Jade obedece, Whitney la azota. Cuando Whitney se da cuenta de que a Jade le gusta y que su coño está mojado, el castigo toma una nota completamente nueva. Al quitarse la chaqueta de su traje, Whiteny toma asiento en el escritorio donde Jade está mirando con curiosidad. Difunde sus muslos para levantar su minifalda y luego tira de su tanga a un lado para revelar su trimmed snatch. Dile a Jade que tal vez ella será buena en esto, Whitney le instruye a la mujer más joven a comer su coño. Jade no necesita ser preguntado dos veces; ella se apoya y utiliza su lengua para rockear el mundo de Whitney. Ahora que ha tenido un clímax, Whitney se siente un poco más indulgente con el comportamiento de Jae. Ella se pone de pie y siente a Jade muy despacio, pasando mucho tiempo en las tetas de Jade. Caminando detrás de Jade, Whitney la dobla sobre el escritorio esta vez para que pueda festejar en ese twat desde atrás. Eventualmente ayuda a Jade al escritorio para que pueda ponerse cómoda entre los muslos de Jade mientras sigue lamiendo. Besando sus sabores mutuos de los labios del otro, las damas se reorganizan para un castigo más sexy. Jade pone Whitney contra el escritorio para que pueda usar su lengua y sus dedos para explorar desde atrás. Volviendo, Whitney le abre los dedos por el pelo de Jade para mantenerla en el lugar correcto. Las chicas se suben al escritorio después, poniendo en direcciones opuestas. Eso les permite llegar a frotar el coño del otro, creando un maelstrom de delicia. No hay nada que puedan hacer pero se agachan una última vez antes de cambiar un beso final y saber que finalmente se entienden uno al otro completamente.
